Trump y el fin de la ayuda al monopolio militar de GAESA
PEDRO ROIG
El 8 de noviembre de 2016 fue un día aciago para Raúl Castro. La noticia
de que el candidato republicano había ganado la presidencia de Estados
Unidos sacudió las entrañas de la tiranía. Lo cierto es que la victoria
de Donald Trump sobre Hillary Clinton clasifica como un resultado
inesperado, de enorme magnitud, que surgió sorpresivamente por haber
estado fuera de las expectativas electorales. ¡Así ruedan los dados de
la suerte!
Trump ya lanzó la primera andanada con un severo ataque a la memoria del
fallecido Fidel Castro a quien señaló como "brutal dictador". La
respuesta de Raúl Castro fue un cobarde silencio. Ni una sola palabra
hostil a Trump, en defensa del "máximo líder". Mala señal. Raúl Castro
es un anciano de 88 años con serios problemas de salud, al frente de un
país en ruinas, al que el destino le cambió a Obama-Clinton por Trump.
¡Duro golpe al cambio-fraude! En Washington y en Miami, se espera que
Trump haga realidad su promesa a los veteranos de la gloriosa Brigada 2506.
Cuando en diciembre 17 de 2014 Obama y Castro anunciaron normalizar las
relaciones bilaterales, se hizo evidente que el acuerdo favorecía las
utilidades financieras de la cúpula militar que controla la economía de
la isla. Este monopolio estatal corresponde a GAESA, enorme conglomerado
de empresas militares, que mantiene en secreto los estados financieros y
tiene como jefe al brigadier Luis Alberto Rodríguez López-Calleja, yerno
de Raúl Castro y pieza esencial de la sucesión dinástica.
En mayo 15 de 2015 se comenzaron a implementar las órdenes ejecutivas de
Obama de las cuales las remesas generan beneficios billonarios al
régimen. Tanto es así, que superan los sectores estratégicos de la
economía cubana, como es la industria turística y las exportaciones de
níquel, azúcar, tabaco y ron. En los años 2015 y 2016, se cancelaron las
restricciones del monto de las remesas, los viajes, el comercio y los
servicios bancarios.
En estos momentos, se calcula que las remesas directas han alcanzado más
de $3,500 millones anuales. Estas incluyen el dinero que se puede enviar
por agencias, tarjetas de crédito, débito, cheques bancarios o efectivo
y permite a los cubanoamericanos, cuya frecuencia de viajes a Cuba es
ilimitada, llevar hasta $10,00.
Las remesas de especies son otra modalidad de envíos a la isla que
supera los $3,700 millones y es celosamente vigilada en las aduanas por
oficiales del Ministerio del Interior (MININT). Estas remesas de
especies incluyen mayormente electrodomésticos, ropa, materiales de
construcción, y piezas de repuesto. La suma de remesas directas y
remesas de especies supera los $7,000 millones anuales.
Es obvio que el cubano de a pie, que recibe un salario promedio de $24
mensuales, no tiene capacidad para adquirir estos productos importados
con altísimos precios para el agotado bolsillo del cubano, pero en los
Estados Unidos, los agentes comerciales del monopolio militar pueden
comprar las remesas de especies para ser enviadas a Cuba, sin límites en
los productos autorizados por los Departamentos del Tesoro y de Comercio
que suelen viajar en contenedores, siendo Tampa el puerto favorito de
embarque.
En las aduanas de Cuba esta operación es minuciosamente supervisada por
oficiales del Ministerio del Interior (MININT) que mantienen un
inventario digitalizado de los productos, sus precios de venta y quienes
lo compran.
La ayuda financiera de los inmigrantes cubanos a sus seres queridos en
la isla debe continuar por entrañables vínculos de familia, pero la
cifra y la frecuencia requieren ser evaluadas cuidadosamente. Lo
esencial es eliminar las millonarias remesas que enriquecen a la
despreciable dictadura militar y la corrupta nomenclatura del Partido
Comunista.
La libertad de Cuba está en manos de su pueblo, pero la sorpresiva
victoria de Trump nos recuerda el aforismo del críptico Heráclito en
relación a una coyuntura inesperada, "la suerte es una diosa que tira
los dados". A Raúl Castro le salió Trump. Así es de frágil el destino de
la sucesión dinástica. Ahora a revocar y poner fin a las remesas
millonarias del monopolio militar de GAESA.
Asesor Senior del Instituto de Estudios Cubanos y Cubano-Americanos de
la Universidad de Miami. Historiador y abogado, es autor de varios
libros y veterano de la Brigada 2506.
Source: Trump y el fin de la ayuda al monopolio militar de GAESA | El
Nuevo Herald -
http://www.elnuevoherald.com/opinion-es/opin-col-blogs/opinion-sobre-cuba/article150289282.html
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