lunes, 1 de agosto de 2016

Sueño de una nueva vida de miles de cubanos se estanca en puerto colombiano

Sueño de una nueva vida de miles de cubanos se estanca en puerto colombiano
Éder Narváez/EFE

TURBO (COLOMBIA)
Mientras amamanta a su bebé, nacido hace solo diez días en la ciudad
colombiana de Turbo, la cubana Aiderelis Alonso asegura que a la isla no
vuelve porque su sueño, como el de más de 2,000 compatriotas suyos
retenidos aquí es que se les permita seguir su accidentado viaje hacia
Estados Unidos.

La mujer, de 27 años y contextura gruesa, llegó hace varias semanas a
Turbo, en la región de Urabá, situada en el noroeste de Colombia, cuyas
autoridades están desbordadas por una avalancha de inmigrante ilegales,
en su mayoría cubanos pero también de países africanos y asiáticos, que
intentan atravesar la frontera con Panamá para buscar nueva vida en
Estados Unidos.

"Estuve cinco días en el hospital desde que el niño nació y nos
atendieron muy bien", dijo a Efe Alonso, quien gracias a la maternidad
recibió el apoyo de un pastor adventista que los acogió en su casa junto
con otros familiares suyos.

El pequeño, a quien su madre dio el nombre de Aidermel, nació en el
hospital de Turbo porque un funcionario de la Alcaldía que visitaba la
bodega en la que están hacinados la mayoría de los cubanos percibió que
estaba a punto de dar a luz y la condujo en su propio vehículo al centro
asistencial.

Según los médicos, el niño nació en buen estado de salud a pesar de las
condiciones de alimentación que tenía su madre, pues en la bodega solo
reciben una comida al día.

"Después de esos días en el hospital la pastora nos fue a buscar porque
no teníamos donde quedarnos, y al campamento no podía ir porque hay
malos olores y bacterias, por eso el niño no podía estar ahí", agregó
Alonso a Efe.

Su madre registró a Aidermel en Colombia y asegura que no volverá a
Cuba, al igual que sus compatriotas, entre los cuales hay al menos otras
15 mujeres embarazadas que no saben el futuro ni la nacionalidad que
tendrán sus hijos, pues están a la espera de que abran la frontera para
continuar el recorrido.

"Estamos compartiendo la alimentación, compartiendo el cuarto; ellos
(Alonso y su familia) nos ayudan a cocinar, están muy pendientes, son
respetuosos y muy especiales", dijo a Efe el pastor adventista Daniel
Ospina Izquierdo, que los acogió en su casa.

Con unos 65.000 habitantes en su perímetro urbano, Turbo es una ciudad
portuaria que vive de la industria bananera y del comercio y que, por su
posición geográfica, es utilizada por traficantes de personas como
trampolín para conducir a los ilegales hacia la selva del Darién y, una
vez en territorio panameño, por toda Centroamérica hasta el país del norte.

El cierre del paso fronterizo para los ilegales hace que Turbo se haya
convertido en una bomba de tiempo pues los cubanos, que dicen ser 2.432,
están desesperados por su situación y preocupados por las noticias de
que el Gobierno colombiano está estudiando la posibilidad de deportarlos
a Ecuador, su última escala antes de entrar en el país.

Por esa razón este fin de semana escribieron una carta dirigida al
presidente estadounidense, Barack Obama, a la ONU y a la Organización de
Estados Americanos (OEA) en la que piden que se les permita llegar "de
manera segura" a Estados Unidos.

La carta abierta, firmada por el "Grupo de cubanos varados en Turbo",
explica que esa intervención les permitiría llegar a Estados Unidos "sin
tener que arriesgar nuestras vidas en la selva a manos de traficantes".

De igual forma aseguran que están "bajo violencia psicológica constante
por la amenaza de deportación a la que estamos sometidos por parte de
las autoridades colombianas".

Los cubanos que salen de la isla comienzan su odisea con viaje a
Ecuador, país que no les exige visado, y desde allí atraviesan Colombia
de sur a norte en un viaje en autobús que puede durar semanas hasta
llegar a Turbo, donde su esperanza de llegar a Estados Unidos ha quedado
truncada.

Por ahora no les queda más que esperar la decisión que tomen las
autoridades pero Migración Colombia, entidad que controla la circulación
de personas en las fronteras, ya advirtió de que no es posible enviarlos
a México como piden, porque eso sería trasladarle el problema a otro
país y estimular a otros cubanos a que tomen el mismo camino.

Source: Sueño de una nueva vida de miles de cubanos se estanca en puerto
colombiano | El Nuevo Herald -
http://www.elnuevoherald.com/noticias/mundo/america-latina/cuba-es/article93009962.html

No hay comentarios:

Publicar un comentario