Unos pocos detalles

Unos pocos detalles
Jueves, 05 de Julio de 2012 18:26
Escrito por Juan Gonzalez Febles

Cuba actualidad, Lawton, La Habana, (PD) He leído con el gusto con que
suelo hacerlo el artículo posteado por Cuban News el pasado jueves 28 de
junio y escrito por Iván García, como especial para Martinoticias.com
titulado, "¿Por qué la disidencia no es un referente para el cubano de a
pie?".

Aunque no veo novedades, algunas omisiones son relevantes. Coincido con
el colega en que la oposición, "no ha sabido aprovechar el evidente
descontento popular para sumar adeptos". Se supone que, -y aquí está la
omisión- el gobierno cubano impide la manifestación pacífica en las
calles y que esto ha sido aceptado por la comunidad internacional.

Es decir, el régimen militar reprime la manifestación antes que esta
salga a la calle. Las Damas de Blanco son y han sido la excepción de una
regla de hierro. Quizás por romper la regla y ser su animadora más
prominente, Laura Pollán no se encuentra entre nosotros. Pero esto, es
sólo una suposición que por el momento no puede ser demostrada.

Lo cierto es que los amarres totalitarios concebidos por la dictadura
"perfecta" cubana funcionan, hasta en armonía con democracias
occidentales que si no de derecho, al menos de hecho los aceptan.

Iván García afirma: "Viven enclaustrados en un mundillo por ellos mismos
creado, salvo contadas excepciones. Es el mundillo de las charlas,
academias, videos y encuentros. Sí, es cierto que sus artículos y
documentos son redactados en la isla, pero generalmente solamente los
leen los agentes encargados de vigilarlos o los periodistas y blogueros
autorizados por el gobierno para replicarles. Un círculo vicioso estéril".

Aquí hay también una omisión o una forma enrevesada de presentarla.
Ciertamente el régimen militar cubano condena a un severo ostracismo a
cualquier ciudadano que se atreve a discrepar o a manifestarse en
contra. Eso es un hecho que nadie puede negar. La exclusión y la
marginación a causa de eventuales disensiones políticas, son tan
notorias que no merece la pena volver más sobre lo mismo. No se trata de
que se enclaustren. Para un mejor decir, los enclaustran. Así de sencillo.

En relación con artículos y documentos redactados desde la Isla, no
siempre y no en todos los casos el gobierno consigue impedir su lectura
dentro de Cuba. Algunos llegan y corren de mano en mano, de CD en CD, o
de memoria flash en memoria flash. Tales documentos y voy a referirme
especialmente a los redactados por periodistas independientes como Iván
García, que es sin duda razonable alguna un brillante exponente de la
prensa independiente, -con sus limitaciones- dan a Cuba y al mundo la
visión más real y más objetiva de la vida en la Isla de que puede
disponerse en estos momentos.

Sobre este particular, recuerdo aún con vergüenza ajena que un ilustrado
redactor dictaminó desde Martinoticias y así lo hizo conocer al mundo,
que los disidentes que ocuparon el Templo de la Virgen de la Caridad del
Cobre en Centro Habana, eran "agentes de la Seguridad del Estado". Que
otros cocineros de refritos desde la distancia repitieron la catilinaria
cardenalicia de que los disidentes que se refugiaron en ese templo, de
Caridad en Centro Habana eran "delincuentes y personas de muy bajo
nivel". Afortunadamente hubo periodistas independientes como Iván, que
pusieron las cosas en su lugar. Gracias a ellos, el mundo supo que el
líder de la asonada fue el arquitecto Vladimir Calderón y que los
ocupantes eran opositores de larga data en la lucha cívica en Cuba, en
muchos casos.

Entonces, a la espera de que los artículos y documentos redactados en la
isla lleguen a sus destinatarios naturales, es decir, a los cubanos de a
pie, resulta imprescindible que llegue al mundo la información fresca
sobre lo que sucede en Cuba, narrado por los privilegiados testigos de
excepción de siempre. El mundo lo merece. Por ello, resulta muy
irresponsable delegar la tarea en ausentes y exigentes promotores o en
redactores llenos de buenas intenciones, pero con los tinteros secos de
la vivencia real que late en la –por ellos- abandonada tierra cubana.

Otra insigne omisión es la que abordaría el hecho de que en Cuba nunca
se ha logrado organizar un foro opositor o cualquier ente representativo
de toda la oposición. No se trata de que todos los opositores sean
tarados o que "La oposición cubana se asemeja a una pasarela de
vanidades", el problema tiene su génesis en que el régimen cubano tiene
como objetivo priorizado de sus servicios especiales, que no haya una
oposición unida y organizada. Entonces por aquello de que los extremos
del círculo se tocan, han logrado –vaya usted a saber cómo- que sea
desde la acción de poderosos grupos y promotores ocultos asentados en
los Estados Unidos –donde si no- en que la constitución de un foro
opositor unido se haya convertido en una quimera.

Hay proyectos que funcionaron muy bien en Cuba y fueron abortados desde
afuera con ofertas y todo tipo de presiones dirigidos a que implosionen
por dentro. Curiosamente, esta actividad de los servicios especiales
cubanos en los Estados Unidos, pasa inadvertida para nuestros amigos los
yanquis. Ellos siempre tienen algo más importante que los Castro y los
asuntos cubanos por atender.

Otra crítica que hace el colega con la que coincido, es aquella que
expresa que: "No son pocos los que se enrolan en la oposición para, a la
vuelta de un tiempo, ganarse el status de refugiado político. Existe una
disidencia golondrina". El caso es que no acierto a comprender por qué
no se deja claro el rol que juega el Programa de Refugiados promovido
por el Departamento de Estado de los Estados Unidos. Como no se dice que
este programa nunca existió para Europa del Este, cuyos luchadores pro
democracia jamás vieron mermadas sus filas a partir de semejante
engendro cocinado en el exterior.

José Martí que no fue perfecto, pero que logró ser muy bueno, entre lo
bueno que dejó dicho, expresó en unos versos memorables que: "Di cuanto
puedas del tirano y del error...", entonces y siempre sobre lo bueno,
ahí tenemos un excelente trabajo que nos entregó Iván García. Sólo que
pienso que le faltaron unos pocos detalles.

Para Cuba actualidad: juan.gonzlezfebles1@gmail.com

http://primaveradigital.org/primavera/component/content/article/117-politica/4520-unos-pocos-detalles.html