lunes, 2 de agosto de 2010

El gran hermano y la policía nacional

El gran hermano y la policía nacional
Aleaga Pesant (PD)

LA HABANA, Cuba, agosto (www.cubanet.org) - Una felación en la cascada
de 23 y malecón. Homosexuales acariciándose en el muro que da al mar.
Lesbianas borrachas de alcohol y cariño mimándose en una parada, a las
diez de la mañana. Un terrible accidente en la parada del hospital
Naval, en la Habana. Grupo de policías uniformados golpeando a un joven
frente a los muros de la Universidad de la Habana. Las imágenes no
mienten. El gran hermano nos vigila.

La mayor tristeza la debe sentir George Orwell, que nos mira desde un
camposanto inglés, y ve confirmadas sus más terribles profecías. La
existencia del Gran Hermano, ese personaje impersonal descrito en una de
sus novelas futuristas más importante: 1984. Ese que también desde lo
alto, a través de las cámaras de televisión de la policía, nos observa.

En el Vedado, Centro Habana, Marianao, la Autopista Nacional, o el
puente de hierro por donde se entra a Varadero, están esas cámaras, que
llegaron a isla masivamente hace algo más de un año, creando suspicacia
entre la ciudadanía, preocupada por los excesivos controles que el
gobierno impone para limitar las libertades. Pero, hay quien va por lana
y sale trasquilado.

El video sin audio, supuestamente perteneciente a la Policía Nacional
Revolucionaria, circula por ahí con el timbre indicativo, Centro de
Vigilancia Ministerial. Además de descubrir las zonas oscuras de la
sociedad, también nos muestra la brutalidad policial o la intolerancia
homosexual.

Las imágenes, grabadas en su mayoría, según se indica, en 2008, ponen
al descubierto la ausencia de mecanismos de persuasión por parte de los
funcionarios en situaciones conflictivas, así como el uso de la
violencia de algunos policías contra varios ciudadanos. También se
muestra la detención de mujeres homosexuales en la parada de guaguas en
Belascoaín y Jesús Peregrino, por el "delito" de besarse en la vía pública.

¿Un boomerang? Puede ser. El artilugio concebido para controlar al
ciudadano, deja las huellas de la mala actuación policial y podría
servir también como prueba para demandarlos en los tribunales. Sería
pertinente saber si los tribunales le pedirían a la Policía Nacional las
grabaciones que incriminen a sus agentes, y si ésta los entregaría.

aleagapesant@yahoo.es

http://www.cubanet.org/CNews/y2010/agosto2010/02_C_1.html

No hay comentarios:

Publicar un comentario