La Habana, ciudad embrujada
Amanece inundada por los sacrificios de los cultos afrocubanos
Miércoles, mayo 3, 2017 | Augusto César San Martín y Rudy Cabrera
LA HABANA, Cuba.- La aparición de animales muertos y el olor nauseabundo
que dominaba la calle hicieron creer a Mayra que el solar yermo
limítrofe con su casa, en el Reparto Eléctrico, se había convertido en
depósito de animales muertos en ofrenda a los Orishas.
El divertido final de la historia se asomó en la cara de un perro
callejero con una gallina muerta entre los dientes. El animal andaba por
la calle como si regresara del mercado, dispuesto a guardar su
adquisición en el solar yermo, donde almacenaba una pata de un carnero y
varias palomas.
Las consagraciones a las deidades afrocubanas saltan de forma simultánea
a la vista, y al olfato de los transeúntes, en los parques y calles de
toda la ciudad. Las "brujerías" en las calles pasaron de la rareza al
hábito de convivir con animales muertos contaminando el ambiente urbano.
Encontrarse en la calle con una cabeza de cerdo cocinada, dentro de una
cazuela de barro, ya no resulta raro. Algo más ordinario son los olores
de las gallinas, palomas, o animales de cuatro patas depositados en una
de las cuatro esquinas de cualquiera de las principales avenidas de la
ciudad.
Marco Antonio Martínez, limpiador de calle de la Empresa de Servicios
Comunales, menciona a CubaNet lo que se encuentra a diario en las
calles. "La brujería está donde quiera (…) Todos los días me encuentro
palomas, cocos, cabezas de puerco, gallinas… de todo eso".
El cordón de ofrendas religiosas que ahoga La Habana se suma a la
inestabilidad e ineficiencia en la recogida de desechos sólidos. Cada
vez se reduce más la higiene ambiental y se amplía el riesgo de las
epidemias que en el verano se ceban en la isla.
La necesidad de un acuerdo religioso
Durante la realización de este reportaje constatamos que resulta difícil
la conciliación de criterios con respecto al depósito de ofrendas en
lugares públicos.
La causa de que las diferentes denominaciones religiosas afrocubanas
alejen el tema del debate se encuentra en su principio: la religión
afrocubana no puede prescindir de las ofrendas. La religiosidad basada
en devociones de alianza y agradecimiento entre las deidades y sus
devotos no deja opciones.
Al respecto el doctor Lucas Vegas, miembro jerárquico religioso de la
Sociedad Yoruba de Cuba declaro a CubaNet: "En el orden ortodoxo de la
religión no podemos cambiar ceremonias. Cuando se ponen alimentos en la
vía hay que hacerlo de una forma adecuada. Casi siempre es el borde de
la vía para que al día siguiente los servicios comunales puedan limpiar
y no crear proliferación de roedores".
Jorge Enrique Figueredo, sacerdote de la religión afrocubana, considera
que las causas de la contaminación tienen que ver más con la educación
que con las reglas religiosas.
"Sacrificamos para poder obtener bendiciones o beneficios, pero es la
conducta lo más primordial para tener todo tipo de bendiciones, para
lograr todas las cosas que necesitamos", dice.
Dentro de la jerarquía religiosa hay quienes prefieren no hablar en
contra de la premisa de consagración afrocubana. Los más conservadores
recomiendan organizar el depósito de la ofrenda, sugieren envolverla y
realizar la práctica en horarios nocturnos. Otros más liberales
consideran que la ofrenda debe depositarse en un contenedor de basura
después de un tiempo de ofrecida.
También tiré una gallina
Los cubanos creyentes y no tan creyentes de la religión Yoruba acuden a
ella para resolver sus problemas. Interpretándolo así y conociendo la
vida problemática que llevamos los cubanos, hay más cola para
consultarse con un santero que para la consulta del médico.
El Estado cuenta con varios decretos sanitarios que abordan las
contravenciones en materia de higiene comunal. El No.272, Artículo 18,
inciso M, trata sobre le vertimiento de desechos sólidos en la vía,
imponiendo sanciones de 100 pesos por la afectación de la salud ambiental.
CubaNet visitó la sede de la Dirección Integral de Supervisión y Control
(DISC), cuyos funcionarios son conocidos popularmente como "inspectores
integrales".
Uno de ellos que, no se identificó, explicó que "no (ocurre) con
frecuencia, pero se imponen multas, sobre todo cuando se contaminan las
aguas de los ríos".
Otro de los inspectores del DISC tiene un testimonio algo diferente: "No
creo que nadie se meta con eso. Yo mismo hace una semana tiré una
gallina en (la avenida) Cuatro Caminos (…) Claro, la envolví y eso, pero
al otro día estaba allí, abierta (…) Aquí todo el mundo ha lanzado un
ebbó (purificación) en la esquina, así que dudo que alguno de nosotros
ponga multa por eso (…) No todo el mundo se atreve a ir contra esas cosas".
Lo palpable es que la ciudad se sumerge en desechos sólidos por la
ineficiencia en la recogida de basura, el abandono oficial y las
consecuentes indisciplinas de los ciudadanos. Así, mientras La Habana
amanece santiguada por los sacrificios que purifican a los creyentes, ya
hay algún que otro indigente que asecha las ofrendas de cuatro patas
para alimentarse.
Video:
https://youtu.be/_ZTO6JGnVBQ
Source: La Habana, ciudad embrujada CubanetCubanet -
https://www.cubanet.org/actualidad-destacados/la-habana-ciudad-embrujada/
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