El fin del Parole provoca zozobra entre los médicos cubanos que han
huido de las misiones
MARIO J. PENTÓN , Miami | Enero 13, 2017
Una treintena de médicos cubanos se reunieron este viernes en Bogotá
para protestar por el fin del Cuban Medical Professional Parole (CMPP),
un programa mediante el cual el personal de salud de la Isla en terceros
países tenía facilidades hasta ayer para recibir visado estadounidense y
viajar a ese país.
El CMPP fue creado por la administración del republicano George W. Bush
en 2006 para permitir a miles de profesionales escapar de las misiones
médicas cubanas en el extranjero.
La Habana pedía desde hace tiempo su derogación, anunciada el jueves por
el presidente Barack Obama, y era una condición para avanzar en la
normalización de las relaciones con Washington.
"Fuimos a protestar para que mantuvieran ese programa que es vital para
los médicos cubanos", dice vía telefónica desde Bogotá el médico Alberto
López, un intensivista cubano que escapó de la misión médica en Venezuela.
En diez años, más de 8.000 profesionales cubanos lograron acogerse a
este programa, especialmente en países como Venezuela y Brasil.
"Tememos por lo que les pueda ocurrir a nuestros colegas. Hay mucha
gente que está en camino y no sabemos qué pueda pasar ahora, porque no
pueden regresar a la misión ni acogerse al Parole", explica López.
Otro de los manifestantes pidió que sean concedidas las visas a todos
aquellos que llevan meses esperando en Colombia una respuesta a sus
solicitudes.
"Estamos trabajando de meseros, en mercados, en lo que aparezca. Apenas
tenemos dinero para sufragar nuestros gastos porque todo lo perdimos en
las cuentas cubanas. Llevamos meses esperando y ahora Obama nos sale con
esto. Y yo que lo tenía en un altar", dice.
A los "cooperantes de la salud", como el Gobierno cubano los llama, se
les asigna una cuenta bancaria en la Isla donde cada mes les depositan
parte de su salario en dólares. Esas cuentas, que se mantienen
congeladas hasta el fin de la misión, son decomisadas por el Gobierno en
caso de que los médicos deserten.
Para el doctor Julio César Alfonso, presidente de Solidaridad sin
Fronteras, una organización sin fines de lucro que se dedica a ayudar a
los médicos cubanos que llegan a Estados Unidos, "es muy lamentable que
el presidente Obama deje un legado tan triste a la comunidad cubana".
Alfonso lamenta que la nueva política no tenga en cuenta el carácter de
"esclavos modernos" del personal de la salud de Cuba destacado en
terceros países.
"Las misiones médicas cubanas están calificadas como una de las mayores
operaciones de trata de persona que ha existido en la historia", dice.
"Los médicos siempre han tratado de escapar. Lo que va a ocurrir ahora
es que va a terminar las formas organizadas de escapar de esta realidad.
Es muy negativo lo que está ocurriendo", dice el doctor, que estima que
más de 3.000 profesionales estarían en limbo migratorio porque escaparon
de las misiones pero no tienen certeza de que serán aceptados en Estados
Unidos.
El sistema de salud cubano tiene 495.609 trabajadores, según los datos
más recientes facilitados por el Gobierno, de los cuales más de 58.000
son doctores especializados. Sus programas de cooperación, que se
financian a través de organizaciones internacionales, se extienden a más
de 90 países en el mundo, desde África hasta Rusia.
La desazón se extiende entre los médicos cubanos "en misión" en diversos
países.
"Cuando los profesionales de la salud salimos de Cuba lo hacemos con un
pasaporte oficial. El Gobierno se apropia de la mayor parte de nuestro
salario y si nos escapamos nos impiden regresar a Cuba por ocho años",
explica una doctora residente en Brasil que asegura tener adelantado
todos sus papeles para recibir el Parole. No obstante, pide no revelar
su identidad, "por si acaso".
"Ayer estuve toda la tarde muy nerviosa, de repente nos llegó ese cubo
de agua fría. Solo puedo pensar en los demás profesionales a los que
esta medida dejó sin amparo. Hay cientos que estaban esperando la
oportunidad para desertar", explica.
A través del programa Mais Médicos, el Gobierno brasileño, en aquel
momento bajo la presidencia del Partido de los Trabajadores, aliado de
Cuba, contrató a más de 11.000 doctores a través de la Organización
Panamericana de la Salud. El acuerdo, que contemplaba un pago de 3.300
dólares por médico, más el pago de otras cuotas para el alojamiento,
representó un importante ingreso para la economía de la Isla, que en
2014 reconoció que recibía 8.200 millones de dólares en concepto de
"exportación de servicios médicos".
Del sueldo pactado con el Gobierno, apenas una tercera parte llega a los
profesionales cubanos.
Desde el comienzo del programa en 2013, las deserciones han sido el pan
de cada día. Escaparon 1.439 profesionales de la salud hacia Estados
Unidos en 2016; otros 1.600 presentaron el examen para revalidar sus
títulos en Brasil y lograr contratos por su cuenta. El matrimonio
también ha sido otra vía para escapar de la tutela del Gobierno cubano.
Según datos brindados por las autoridades brasileñas, más de 1.000
cubanos tienen lazos conyugales con ciudadanos de ese país.
"Yo pude meter los papeles. Ahora tengo que esperar, pero ¿qué pasará
con los demás que tenían pensado huir?", se pregunta una doctora cubana
que estaba destacada en Venezuela.
"Antes al menos uno tenía la seguridad de que si dabas el salto tendrías
dónde caer. Si te escapas ahora sabes que eres out por regla", dice en
vocabulario deportivo un especialista en rayos X que trabaja en el
estado de Anzoátegui. "Venezuela está en candela como Cuba pero ya no
nos queda más remedio que quedarnos aquí".
Source: El fin del Parole provoca zozobra entre los médicos cubanos que
han huido de las misiones -
http://www.14ymedio.com/nacional/Parole-zozobra-medicos-cubanos-misiones_0_2144785510.html
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