La ceiba embrujada de Fidel Castro
Un árbol que todavía se yergue en una apartada zona de La Habana fue
"trabajado" para el comandante
Miércoles, enero 11, 2017 | Luis Cino Álvarez
LA HABANA, Cuba.- En un parque del reparto Bahía, al este de La Habana,
custodiada por jardineros, babalaos y segurosos, se yergue una ceiba que
hace más de ocho años santeros oficialistas "trabajaron" para que le
diera larga vida a Fidel Castro.
Por entonces, hacía dos años que el Comandante, gravemente enfermo, se
había visto obligado a traspasar el poder a su hermano, el general Raúl
Castro.
La ceiba fue trasplantada en ese parque al amanecer del 13 de agosto de
2008, el día en que Fidel Castro cumplió los 82 años.
Era un martes, que, según aseguran los babalaos, por ser el día del
Diablo es el idóneo para hacer trabajos de santería.
La ceiba, que tendría entonces aproximadamente la edad del Comandante,
fue traída del patio de la casa de una madrina que había fallecido hacía
poco, a muy avanzada edad, y que era famosa por sus poderes.
Antes que amaneciera, los babalaos sacrificaron y ofrendaron a los
santos, en el mayor secreto y con solemnidad, varios gallos negros y una
jicotea para que "recogiera todo lo malo". Luego rociaron el tronco del
árbol con la sangre de los animales.
Cuando salió el sol, trasladaron la ceiba consagrada al parque y la
plantaron entre toques de tambores y cantos a Olodumare, que para los
yorubas es el creador de todo y el dueño de los destinos.
En aquella ceremonia participaron 50 babalaos, que antes de dar 16
vueltas al árbol, rogaron para que el Comandante se repusiera de su
enfermedad y viviera tanto como la ceiba.
La ceiba, que para los santeros es la reina de los palos sagrados, vive
cientos de años. Fidel Castro duró hasta los 90. Murió el pasado 25 de
noviembre. Y la ceiba de Bahía sigue en pie. Es probable que esté allí
por mucho tiempo. No tanto porque los que ordenaron colocarla allí crean
que pueda servir para eternizar al castrismo, sino porque se dice que
los orishas castigan con severidad al que se atreve a derribar una
ceiba. Y ya se sabe cuán supersticiosos somos los cubanos. Aunque no
creamos demasiado en "esas cosas", pero por si acaso…
Esa ceiba de Bahía siempre me ha recordado la que fue plantada por
órdenes de Gerardo Machado en el Parque de la Fraternidad en 1928 y que
todavía sigue allí.
Bajo las raíces de esa ceiba enterraron una nganga que fue preparada,
también un martes, por los más renombrados mayomberos y ganguleros que
Machado pudo encontrar. Contenía huesos de locos y asesinos, tierra de
cementerio ligada con tierras de 21 países de América y una piedra
hallada en un lugar donde cayó un rayo.
He escuchado a varios santeros asegurar que "aquel trabajo de brujería
de Machado desgració a Cuba para siempre, la dejó maldita".
¿Será la ceiba de Bahía el remate de aquel daño? ¿Seremos castigados por
haber defraudado las expectativas desmesuradas del Comandante? ¿Se nos
cerrarán los caminos a la libertad y el progreso? ¿Estaremos condenados
a correr y no llegar?
luicino2012@gmail.com
Source: La ceiba embrujada de Fidel Castro | Cubanet -
https://www.cubanet.org/opiniones/la-ceiba-embrujada-de-fidel-castro/
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