Zika y dengue, sospechosos habituales en Santiago de Cuba
MARITZA BETANZOS | Santiago de Cuba | 18 de Octubre de 2016 - 04:34 CEST.
Durante el mes de septiembre y en lo que va de octubre el Ministerio de
Salud Pública ha extremado las medidas en la ciudad de Santiago de Cuba
para combatir los mosquitos que transmiten el dengue y el zika. La
alarma de las autoridades es evidente. En algunas áreas se pesquisan
diariamente las viviendas en busca de personas con algún tipo de síntoma
y se mide la temperatura a cada habitante presente. Además, se ha
retomado el plan semanal de fumigaciones, que se realizan casa a casa;
en las calles, con carros, y desde el aire, con avionetas.
El principal medio de prensa de la provincia, el semanario Sierra
Maestra, exhorta en cada edición a mantener las medidas de higiene,
denuncia los frecuentes vertederos aparecidos en la ciudad, pondera la
labor de los operarios de la "lucha antivectorial" y entrevista a
médicos que detallan las sintomatologías del zika y el dengue. Pero no
da cifras de enfermos ni de ingresados. No hay un reconocimiento oficial
de la presencia de las enfermedades en el territorio.
Las historias se conocen por los enfermos o sus familiares. Los casos
sospechosos los concentran en el Hospital Ambrosio Grillo, la antigua
escuela de trabajadores sociales y el campamento de pioneros de la
Granjita Siboney. Los niños son enviados al Hospital Infantil Sur,
conocido como "La Colonia".
María Caridad Cuevas tiene cinco años, estuvo ingresada en La Colonia
durante siete días. Su madre dice que se le llenó el cuerpo de rash
(erupción en la piel). "Me dijeron que era zika, pero en el certificado
dice 'sospecha'. Nunca me han dicho el resultado de los análisis".
Al padre de Surinay, de 35 años, le salió un rash en la piel. En la
consulta le diagnosticaron "sospecha de dengue". Al estar embarazada de
cuatro meses y convivir con él, a ella la ingresaron para practicarle
exámenes preventivos. Finalmente también presentó síntomas y su
gestación fue interrumpida. Está devastada, lleva años perdiendo
embarazos y no consigue tener su primer hijo.
La doctora Yasnelis Salas, convaleciente de zika, estuvo siete días en
el Hospital Juan Bruno Zayas, donde ingresan a embarazadas. La ubicaron
allí por haber dado a luz recientemente. Asegura que en el lugar vio
varios casos. "Se diagnostican como 'sospecha' de zika o dengue porque
el análisis de orina demora seis días y el de sangre 21. Esas muestra
van a La Habana, por lo que la mayoría de los dados de alta salen solo
con un diagnóstico de 'sospechosos'".
Su caso, afirma, fue zika, pues se lo confirmaron en su área de salud.
Otra doctora de un consultorio médico, quien pidió anonimato, no
entiende "por qué no declaran la ciudad en cuarentena".
"Hay mucho más zika que dengue", dice la doctora. "Están ingresando a
las embarazadas del primer y segundo trimestre para prevenir las
malformaciones que puede producir la enfermedad. Todos los días al
terminar en el consultorio tenemos que acudir al puesto de mando del
policlínico, es obligatorio hacer una evaluación de los casos
reportados", añade.
Las consecuencias por no ingresar en caso de ser "sospechoso" son
severas. La activista Doraisa Correoso Pozo está acusada de "propagación
de enfermedades epidémicas" y fue a juicio el 21 de septiembre. El
proceso se postergó a causa de la no comparecencia de los médicos
citados por la Fiscalía.
Correoso dice que, al sentir malestares, acudió al policlínico 20 de
Noviembre y la urgieron a ingresar en el Hospital Ambrosio Grillo, pero
trabajadoes de ese centro le aseguraron que estaba atestado de pacientes.
"Decidí irme para mi casa. Ya tuve la experiencia del año pasado cuando,
enferma de dengue, estuve durmiendo tres días en una silla en ese
hospital con mi ventilador, mi cubo y mi mochila, por falta de camas",
explica.
Al día siguiente, dice Correoso, se presentó la Policía en su casa con
un epidemiólogo y la condujeron a la unidad conocida como "La
Motorizada", donde fue acusada.
Correoso fue enviada a la Granjita Siboney con una advertencia en su
certificado que decía "fuga", escrita por el epidemiólogo.
Tras recibir el alta, la Policía le informó que debía contratar un
abogado, aunque no iría presa, solo le pondrían una multa.
Correoso espera el nuevo juicio. Dice que no va a contratar ningún
abogado: "Al final voy a ser declarada culpable porque ya la sentencia
está dictada".
Zika, dengue o ambas, nadie lo aclara con precisión. Pero parece claro
que Santiago de Cuba atraviesa una situación crítica.
Source: Zika y dengue, sospechosos habituales en Santiago de Cuba |
Diario de Cuba - http://www.diariodecuba.com/cuba/1476728111_26072.html
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