Otra vez paredón
13 octubre, 2016 3:50 pm por Juan Gonzalez Febles
Lawton, La Habana, Juan González, (PD) Existen recurrencias que con su
reaparición dan la medida de algo. El pasado domingo 9 de octubre una
porrista antisocial al servicio de los paramilitares que sirven a los
represores asalariados de la policía Seguridad del Estado (DSE) pidió
paredón para las valientes mujeres de blanco frente a la sede nacional
del Movimiento Damas de Blanco en la barriada de Lawton en la capital
cubana.
Aunque no se trata de algo atípico, sino de otra recurrencia en el
actuar del régimen militar totalitario y dinástico castrista,
políticamente de claro corte fascista, el hecho en sí, no deja de ser
relevante. Se trata de una recurrencia al año 1959 en que el régimen
necesitaba destruirlo todo. En abierta violación a la Constitución de
1940 empezaron juicios sumarios sin garantías procesales de ningún tipo
y con ellos, se restableció en Cuba el abolido paredón de fusilamiento,
un emblema de la presencia colonial española en la Isla eliminado por la
república, para que ningún cubano ascendiera a patíbulo alguno a partir
de sus actuaciones o sus posturas políticas.
Fueron momentos en que el condotiero argentino, de aciaga recordación,
Ernesto Guevara, proclamaba ante el mundo "…hemos fusilado y
continuaremos fusilando", ya que su sociopatía o sicopatía le hacía
experimentar placer cuando tomaba alguna vida, fuera esta humana o no. Y
que por compartir sus torcidas inclinaciones se fue hasta Bolivia entre
otros lugares. Trae a la palestra pública que en aquellos días oscuros
de 1959, el jefe de estado de facto y heredero del poder absoluto, Raúl
Castro llevó a cabo ejecuciones extrajudiciales en la zona oriental del
país que sufrieron miembros del ejército constitucional y los cuerpos
policiales que enfrentaron la insurgencia verdeolivo.
Los hechos tienen lugar en el marco de la normalización de relaciones
con los Estados Unidos en momentos en que el régimen atraviesa una
situación difícil que puede hacerle recorrer otra crisis similar a la de
los años 90 a partir del naufragio de la extinta Unión Soviética. Es en
estas circunstancias que una porrista sacó del armario tan nefasta
consigna y coincidentemente Rusia en declaración del viceministro de
Defensa ruso, Nikolái Pankov, anunció la disposición de reabrir bases
militares en Cuba y Vietnam.
Quien posibilitó el apoyo logístico para el paredón fue la Unión
Soviética con el apoyo brindado a la dictadura cubana desde los primeros
momentos. Después de la Crisis de Octubre en 1962, la presencia
soviética se enmascaró, pero no cesó. La base de Lourdes, cerca de La
Habana, estuvo operada por Moscú desde 1967 hasta aproximadamente 2001.
Fue el mayor centro de espionaje radioelectrónico ruso fuera de su
territorio y se dice que, hacía transparente para Rusia, a todas las
Américas.
La perspectiva puesta de relieve con la reaparición de la petición
pública del paredón coincide con circunstancias similares a las vividas
en aquellos años aciagos desde 1959, con el acento puesto en los
correspondientes a la década del sesenta. Este fue el periodo en que más
se fusiló en Cuba, "…gracias a la ayuda generosa y desinteresada de la
Unión Soviética".
Esperemos que la normalización de relaciones entre los Estados Unidos y
Cuba no contribuya a la afirmación de nuevos enclaves militares rusos
que desde Cuba, amenacen a las Américas. Ojala que esto no materialice
una respuesta como la que logró ser evitada en aquella crisis de los
misiles de 1962. Esperemos que las actitudes de aquellos, a quienes
Andrei Gromiko definió como "payasos irresponsables" en los días
inciertos de octubre de 1962, no consigan echar a perder algo más, que
el muy discutible legado de un laureado con el Premio Nobel de la Paz.
En Cuba, volvió a corearse ¡¡paredón!!
j.gonzalez.febles@gmail.com; Juan González
Source: Otra vez paredón | Primavera Digital -
http://primaveradigital.org/cubaprimaveradigital/otra-vez-paredon/
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