viernes, 8 de julio de 2011

A la espera de estadísticas fiables

Reformas económicas

A la espera de estadísticas fiables
Elías Amor
Valencia 07-07-2011 - 10:44 am.

Todavía no contamos con información estadística sobre el impacto de las
medidas económicas aplicadas a partir de los 'Lineamientos'.

Uno de los problemas más recurrentes de la economía castrista es la
ausencia de datos estadísticos fiables, de calidad, adecuados para
realizar un análisis de coyuntura.

A diferencia del resto de países de América Latina, que exponen de forma
objetiva la información de su economía, con datos elaborados con
procedimientos metodológicos rigurosos avalados por organismos
internacionales, el régimen castrista no tiene la menor intención de ello.

Llevamos seis meses transcurridos de año, y en este período, no se ha
facilitado información estadística alguna sobre el impacto de las
diversas medidas dispersas que se están adoptando con los denominados
"Lineamientos" sobre las variables macroeconómicas principales, a saber,
el PIB, el consumo, la inversión, las exportaciones o las importaciones.

No se dispone de información alguna sobre el comportamiento del nivel de
precios y su correlato, la tasa de inflación, y los datos sobre
desempleo se encuentran condicionados por los elevados niveles de
subocupación que existen en la mayor parte de las actividades
económicas. Un asunto, por cierto, denunciado en las asambleas del
partido realizadas en los últimos meses.

La falta de información alcanza a todos los sectores y actividades
productivas. No sabemos, por ejemplo, qué impacto han tenido las medidas
de entrega de tierras en arrendamiento sobre la producción final
agraria. Desconocemos la influencia que ha tenido la progresiva
autorización de apertura de pequeños establecimientos gastronómicos
sobre el comportamiento del consumo privado. Tampoco se tienen datos
sobre los niveles de la producción en los principales sectores de la
manufactura. Y la información relativa al turismo se refiere a
indicadores cuantitativos de viajeros, pernoctaciones, pero no se sabe
el impacto que ha tenido sobre la demanda agregada de consumo.

Todos los países cuentan con indicadores trimestrales para medir y
evaluar el comportamiento de la economía. Este tipo de datos
estadísticos se elaboran y difunden por organismos estadísticos
especializados e independientes, que emplean metodologías similares para
facilitar el contraste de la información a nivel internacional. En el
castrismo, este tipo de cuestiones, sin duda fundamentales para medir el
nivel de credibilidad de la economía en el mundo, no parecen ser
relevantes. Aunque la Oficina Nacional de Estadística de Cuba se emplea
a fondo en publicar monografías con datos relativos a diversas
actividades y sectores sociales, en el castrismo la información
macroeconómica agregada está ausente de los planes y reformas de las
autoridades.

Y, sin embargo, estos datos son fundamentales, y se les debe otorgar la
máxima prioridad. ¿Por qué, se preguntarán los castristas, acostumbrados
a sus monótonas informaciones estadísticas sobre cosechas obtenidas,
casi siempre bañadas por notables dosis de demagogia?

La respuesta es sencilla. Porque hacen falta esos datos para ganar en
credibilidad internacional. ¿De verdad cree el régimen que alguien en su
sano juicio puede invertir en la economía castrista si no se dispone de
estas referencias, fundamentales para calcular los rendimientos de
cualquier proyecto?

Todos los países que elaboran y difunden sus datos, sin temor y sin
manipulaciones, se someten al escrutinio de los mercados internacionales
y pueden mejorar sus posibilidades reales de obtención de recursos
financieros. Existe, además, un interés, ciertamente elevado en
numerosos analistas y estudiosos, por evaluar el impacto que las medidas
contenidas en los denominados "Lineamientos" pueden ejercer sobre la
economía castrista, en su necesario devenir hacia el mercado y la libertad.

La consecuencia que cabe extraer de lo expuesto es doble, o bien que el
castrismo no dispone de estas informaciones por incapacidad técnica para
adaptar sus estadísticas oficiales a los modelos internacionales, o que,
incluso disponiendo de los datos, se niega a difundirlos por el
deficiente estado que presentan los mismos, lo que impide recurrir a ese
tono demagógico con el que históricamente nos obsequian con la
denominada "estadística de cosechas", más fácil de manipular.

Ya hace algunos años, CEPAL mantuvo en suspenso las informaciones
ofrecidas por las autoridades castristas, al no aceptar los métodos de
medición del PIB que incorporaban unos cálculos que otorgaban prioridad
a las actividades de servicios de salud y educación, a unos precios
absolutamente inadmisibles para los niveles de renta y desarrollo de la
economía castrista.

Mientras tanto, seguimos a la espera de una inexistente mejoría de la
estadística oficial, que permita contrastar la dinámica económica del
castrismo con la del resto de países de América Latina. Ayer, CEPAL
formuló favorables expectativas de crecimiento económico para la región
durante el presente año, pero mucho nos tememos que estos datos no se
puedan aplicar directamente al complejo entramado burocrático e
ineficiente de la economía castrista.

También en el ámbito de la estadística económica agregada el régimen
tiene mucho que hacer.

http://www.ddcuba.com/cuba/5583-la-espera-de-estadisticas-fiables

No hay comentarios:

Publicar un comentario