Fecha de publicación:
1/8/2010
Ser uno de los mejores baloncestistas de Cuba no asegura un sueldo de
estrella, ni mucho menos. Tanto Taylor como sus compañeros en la
selección ganaban diez dólares al mes por defender los colores de su país.
Ahora, las cosas han cambiado. El que será el base del Establecimientos
Otero ha comenzado a aprender el oficio de tapicero en la empresa de uno
de los directivos del club. Con eso y lo que le paga el Xuventude puede
ganarse la vida en España.
«Es duro perder a un hijo, pero ellos saben que hemos cambiado para
mejor», contesta Taylor cuando se le cuestiona sobre lo que piensa su
familia cubana sobre la decisión que tomaron. Afirma el base caribeño
que el Gobierno de su país no ha tomado represalias con ellos
-«solamente un poco al principio, pero con los días fue pasando la
presión»-. Él, a pesar de tener solo 23 años de edad, dejó allá una
novia y una niña pequeña. Eso, y sus estudios de Ciencias del Deporte."
http://www.lavozdegalicia.es/deportes/2010/08/01/0003_8643500.htm
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