martes, 10 de noviembre de 2009

OBAMA TOCA A LA PUERTA PERO CASTRO NO LA ABRE

DECLARACIONES DE LA NEGOCIADORA BISA WILLIAMS

OBAMA TOCA A LA PUERTA PERO CASTRO NO LA ABRE

Por Carolina Barros
Analítica
Publicado en Ámbito Financiero
Infosearch:
Fidel Nuñez
Analista
Jefe de Buró
Latinoamérica
Dept. de Investigaciones
La Nueva Cuba
Noviembre 8, 2009

Desde el embargo votado en 1963 por el Congreso en Washington, la
relación con Cuba venía asomando como la punta del iceberg de la
política estadounidense hacia América Latina. Hasta ahora. Es que a esa
lectura sobre los movimientos de EE.UU. en su «patio trasero» también le
llegó, con Barack Obama, su proceso de cambio.

«Queremos disminuir esa especie de tensión que hasta hoy significó Cuba
como centro del enfoque frente al resto de los países de la región»,
dijo a Ámbito Financiero Bisa Williams, subsecretaria adjunta del
Departamento de Estado para el Hemisferio Occidental, y la principal
delegada del presidente demócrata para explorar una apertura de las
relaciones con el régimen castrista. «Ese enfoque concentrado en Cuba
provocaba críticas a EE.UU.», añadió Williams en una entrevista
telefónica. Ella cree que la relación con Cuba «no debe interferir o
molestar en nuestro vínculo con los otros países del Caribe,
Centroamérica y Latinoamérica».

Septiembre marcó un cambio de enfoque. Fue cuando Bisa Williams llegó a
La Habana para tratar, entre otros temas, la reanudación del servicio de
correo directo entre los dos países. No sólo fue ése el viaje inaugural
de la funcionaria a la isla (aunque antes había estado en Guantánamo)
sino el primero, en siete años, de un diplomático estadounidense de tan
alto rango.

Su estadía en Cuba, de un par de días previstos se extendió a seis, e
incluyó, además de reuniones con funcionarios del Gobierno de Raúl
Castro, el traslado a Pinar del Río para conocer las condiciones de sus
habitantes después del paso de varios huracanes, una reunión con
miembros de la sociedad civil (políticos disidentes, prisioneros de
conciencia, Damas de Blanco e intelectuales) y la concurrencia, como una
«fan» más, al concierto del cantante Juanes en la Plaza de la Revolución
de la capital.

O la visita en la cárcel a un preso de doble nacionalidad (hasta ese
momento vedado a diplomáticos de EE.UU.), hecho que instaló otro
precedente en las relaciones. Algunos interpretan estas novedades o
«apertura» del castrismo durante la visita de Williams como la respuesta
al levantamiento, desde Washington, a las restricciones a
cubano-estadounidenses para viajar a la isla y al envío de remesas,
además del permiso a empresas «gringas» para negociar contratos de
comunicaciones con Cuba. Otros, como Tomás Bilbao, director del Cuba
Study Group, consideran que «no es un tema de respuestas sino de que la
política de la administración Obama es la de romper con el aislamiento».

En el Departamento de Estado, sin embargo, habría algunos reparos. «Ya
le dijimos al Gobierno de Cuba que son varios los actos que pudieron
hacer para mostrar, no sólo a los EE.UU., sino al mundo, que ellos
desean una nueva relación con los demás, con nosotros o con quien sea»,
dice Bisa Williams. «En el pasado hubo mucha distancia y otro tipo de
retórica», aclara la funcionaria. «Nosotros hemos cambiado la retórica,
y Cuba, aunque más lentamente, va cambiando la suya», prosigue. Por eso
es que «vamos a seguir insistiendo y eso ya lo dijo el presidente Obama:
'Con la retórica no basta'. Tenemos que lograr hechos concretos», señaló
la subsecretaria a este diario.

Ante la consulta de Ámbito Financiero, una alta fuente del Departamento
de Estado no se guarda la lista de hechos concretos que permanecen en
«stand-by». «Todavía el Gobierno de Cuba tiene más de 200 prisioneros de
conciencia en sus cárceles», dice. «Firmaron dos convenios con Naciones
Unidas pero aún no los ratificaron; dijeron que iban permitir la llegada
de asesores de varios organismos de derechos humanos pero todavía no lo
concretaron; prometieron mayor acceso del ciudadano cubano a internet y
a la información pero está sucediendo lo contrario; no sólo están
cerrando el acceso a sitios sino que prohíben la comunicación entre
cubanos dentro de la isla», termina. ¿Hay plazos para concretar esos
«hechos concretos»?

«Desafortunadamente, cuando les pedimos que nos dieran plazos, el
gobierno de Cuba no quiso hacerlo», responde un vocero de alto rango del
Departamento de Estado. Y pasa a describir, a modo de ejemplo, uno de
los programas de cooperación que el Gobierno de La Habana decidió dejar
en un limbo. «Les ofrecimos un programa de educación en EE.UU. para 27
jóvenes cubanos, que duraría un año a partir de este ciclo escolar»,
relata. «Algo pequeño, como para comenzar, pero el Gobierno de Cuba no
lo quiso autorizar».

De acuerdo con esta fuente, en la visita de Williams a la isla las
autoridades cubanas habrían pedido más información a las estadounidenses
sobre el programa. Una puerta entreabierta, «pero sin plazos», aclaran.
«El problema con este estadio de la relación bilateral es que en Cuba no
saben cómo responder al trato amable y no agresivo de la administración
Obama», afirma Alfredo Durán, nacido en Cuba y desde hace 30 años
dirigente político del Partido Demócrata en Florida. «También dentro de
EE.UU. la política de Obama trae problemas», aclara José Manuel Palli,
director de Cuba Legal Forum.

«Si en el Congreso se votara a favor de levantar las restricciones que
impiden viajar a Cuba a los estadounidenses nativos y sin raíces
cubanas, la relación de fuerzas jamás volvería a ser la misma y se
despejaría el camino hacia una mejor relación bilateral», dijo este
abogado en referencia al proyecto de ley que ya cuenta con el patrocinio
de referentes demócratas, como el senador Richard Lugar, pero que por el
momento es vetada por otro demócrata influyente en Capitol Hill, el
senador Bob Menéndez. Mientras tanto, la nueva política exterior hacia
Cuba sigue su marcha. «Buscamos condiciones de vida democrática para los
ciudadanos cubanos y además mostrarle al Gobierno de Cuba que en algunos
temas o asuntos.

LA NUEVA CUBA (9 November 2009)
http://www.lanuevacuba.com/2009/Nov/notic-09-11-841.htm

No hay comentarios:

Publicar un comentario