sábado, 4 de febrero de 2012

Cronología de la represión y censura a los homosexuales por la revolución cubana.

Mapa de la homofobia

Cronología de la represión y censura a los homosexuales por la
revolución cubana.
Por Manuel Zayas

Unidades Militares de Ayuda a la Producción, CubaDe un artículo
aparecido en el diario cubano El Mundo, el 14 de abril de 1966, sobre
las Unidades Militares de Ayuda a la Producción (UMAP), campos de
concentración donde fueron confinados homosexuales, testigos de Jehová y
disidentes. Jean Paul Sartre dijo: "En Cuba no hay judíos… pero hay
homosexuales". Imagen tomada de El archivo de Connie, donde se puede
descargar en PDF.

1961

El Ministerio del Interior ordena redadas policiales contra los
homosexuales. Entre las más sonadas, la del 11 de octubre y que se
conoció como «la noche de las tres P», contra prostitutas, proxenetas y
pederastas (o «pájaros«, como se llama en Cuba a los gays). Entre los
tantos detenidos en esta operación policial figura el escritor Virgilio
Piñera, quien duerme una noche en los calabozos de la prisión de El
Príncipe.

1963

El 13 de marzo, en un discurso en la escalinata de la Universidad de La
Habana, Fidel Castro afirma: «Muchos de esos pepillos vagos, hijos de
burgueses, andan por ahí con unos pantaloncitos demasiado estrechos;
algunos de ellos con una guitarrita en actitudes 'elvispreslianas', y
que han llevado su libertinaje a extremos de querer ir a algunos sitios
de concurrencia pública a organizar sus shows feminoides por la libre.
(…) La sociedad socialista no puede permitir ese tipo de degeneraciones.
(…) Estoy seguro de que independientemente de cualquier teoría y de las
investigaciones de la medicina, entiendo que hay mucho de ambiente,
mucho de ambiente y de reblandecimiento en ese problema. Pero todos son
parientes: el lumpencito, el vago, el elvispresliano, el 'pitusa'».

1965

En enero, con motivo del premio Casa de las Américas, el poeta
estadounidense Allen Gingsberg visita Cuba. Como disidente de toda
ideología, Gingsberg aboga, entre otras cosas, por la legalización de la
marihuana, y declara abiertamente su homosexualidad y un especial
interés por conocer al «atractivo Che Guevara«. Las autoridades cubanas
se escandalizan y lo expulsan en un avión con destino a Praga. Por sus
contactos con Gingsberg, el poeta cubano José Mario es arrestado y las
Ediciones El Puente, cerradas.

En una entrevista concedida al periodista Lee Lockwood y publicada en el
libro Castro's Cuba, Cuba's Castro, Fidel Castro dice: «Nunca hemos
creído que un homosexual pueda personificar las condiciones y requisitos
de conducta que nos permita considerarlo un verdadero revolucionario, un
verdadero comunista. Una desviación de esa naturaleza choca con el
concepto que tenemos de lo que debe ser un militante comunista (…) Pero
sobre todo, no creo que nadie tenga una respuesta definitiva sobre la
causa de la homosexualidad. Creo que debemos considerar cuidadosamente
este problema. Pero seré sincero y diré que los homosexuales no deben
ser permitidos en cargos donde puedan influenciar a los jóvenes».

El 19 de noviembre se crean las Unidades Militares de Ayuda a la
Producción (UMAP), donde son confinados unos 25.000 hombres, básicamente
jóvenes en edad militar, entre los cuales hay religiosos, homosexuales y
disidentes, a los que se cataloga como parásitos, vagos y antisociales.

Durante una acción policial a gran escala por todo el país, miles de
jóvenes son arrestados en sus casas y llevados por la fuerza en trenes,
camiones y autobuses hasta la provincia de Camagüey, donde son
concentrados en diversos estadios deportivos. Luego se les traslada
hacia zonas agrícolas, para realizar trabajo forzado, sobre todo en el
corte de caña. Se albergan en barracas insalubres, ubicadas en
campamentos cercados con alambre de púas, que son custodiados por
efectivos de las Fuerzas Armadas Revolucionarias (FAR).

Entre los militares responsables de esos campos de concentración están
los nombres de José Ramón Silva, Rogelio Acevedo, Víctor Drake, René de
los Santos, Ramón Pardo Guerra, Israel Pardo Guerra, Quintín Pino
Machado, Reinaldo Mora Pérez, Carlos Cabale Araujo y Felipe S. Guerra Matos.

1966

En marzo, un alto jefe de las UMAP, asegura que los integrantes de estas
unidades «son militares y no presos políticos, como se ha querido
pretender».

Raúl Castro, ministro de las FAR, declara en abril que en el «primer
grupo de compañeros que han ido a formar parte de las UMAP se incluyeron
algunos jóvenes que no habían tenido la mejor conducta ante la vida,
jóvenes que por la mala formación e influencia del medio habían tomado
una senda equivocada ante la sociedad y han sido incorporados con el fin
de ayudarlos para que puedan encontrar un camino acertado que les
permita incorporarse a la sociedad plenamente».

Las autoridades sacan de circulación la novela Paradiso, de José Lezama
Lima.

1968

Ante las protestas de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba (UNEAC),
de organismos internacionales y también de intelectuales extranjeros de
renombre, son cerradas las UMAP. Según los ex confinados —que
actualmente tienen una asociación de igual nombre en Miami—, allí
ocurrió de todo: juicios sumarios, automutilaciones, suicidios y todo
tipo de abusos por parte de los guardias. Se dice que la documentación
sobre esos campos de concentración fue destruida.

Paralalemente a la creación de las UMAP en 1965, se establecieron campos
de trabajo forzado en la agricultura, en régimen paramilitar, a los
cuales serían enviadas las personas que manifestaban su deseo de
emigrar. El trabajo agrícola era condición para otorgar el permiso de
salida, y muchos de los que intentaron evadir esos trabajos eran
condenados a prisión.

Ya en 1968, en plena Ofensiva Revolucionaria, el gobierno bautizó los
campos de trabajo forzado con un nuevo nombre. Los llamó Campamentos de
Apátridas y los mantendría en vigor hasta mediados de los 70. Decenas de
miles de cubanos pasaron por esa suerte de gulag castrista, básicamente
hombres que sobrepasaban la edad del servicio militar obligatorio. A los
varones entre 15 y 26 años no se les permitía emigrar. Por lo general,
las mujeres sin hijos menores de 7 años eran enviadas a granjas avícolas
en un régimen menos severo.

El departamento de orden público de esos campos llevaba un estricto
control de cada ciudadano, y vigilaba con especial interés "los casos de
homosexualidad", según el Reglamento para Campamentos de Apátridas
reproducido en el libro Diario para Uchiram, de la escritora Julia
Miranda (Verbum, Madrid, 2008).

El poeta Delfín Prats recibe el premio David de la UNEAC por su poemario
Lenguaje de mudos. Por su marcado carácter homosexual, el libro no sale
a la venta: será convertido en pulpa.

Aparece en Francia la novela El mundo alucinante (Éditions du Seuil), de
Reinaldo Arenas. El libro ganó una mención en el premio Casa de las
Américas, pero no fue publicado en la Isla debido a la negativa de su
autor de suprimir referencia alguna a la homosexualidad.

El 28 de septiembre, en un discurso en la Plaza de la Revolución, Fidel
Castro dice: «En nuestra capital, en los últimos meses, le dio por
presentarse un cierto fenomenito extraño, entre grupos de jovenzuelos, y
algunos no tan jovenzuelos (…) que les dio por comenzar a hacer pública
ostentación de sus desvergüenzas. Así, por ejemplo, les dio por comenzar
a vivir de una manera extravagante, reunirse en determinadas calles de
la ciudad, en la zona de la Rampa, frente al hotel Capri…». Estas
palabras son caldo de cultivo de las continuas redadas contra hippies,
melenudos, prostitutas y homosexuales. Las imágenes de archivo de este
discurso son visibles en mi documental Seres extravagantes (2004).

1969

Abel Prieto Morales (padre del actual ministro de Cultura) publica en el
número 113 de la revista Bohemia el artículo «La homosexualidad», en el
que refiere: «los adultos homosexuales son numerosos, y están en todos
los medios y en todas las profesiones; muchos son a la vez
heterosexuales y homosexuales. El hecho no se reduce a reconocerlos ni a
desconocerlos, sino a evitar que sean factores de contagio. Para ello,
lo recomendable es, básicamente, procurar que no sean conductores de
juventudes y tengan el menor contacto posible con la niñez que surge».

1971

El 16 de marzo entra en vigor la Ley 1231, sobre la vagancia como índice
de peligrosidad y como delito, que induce a la obligatoriedad del
trabajo para la población masculina y establece que la desvinculación
laboral es un estado pre-delictivo. Esta ley fue derogada con su
incorporación al Código Penal de 1979, que cataloga la vagancia como
«estado peligroso».

Del 24 al 28 de abril se celebra en La Habana el I Congreso de Educación
y Cultura. Las autoridades competentes concluyen que «no es permisible
que por medio de la calidad artística reconocidos homosexuales ganen
influencias que incidan en la formación de nuestra juventud (…) Se
sugirió el estudio para la aplicación de las medidas que permitan la
ubicación en otros organismos de aquellos que, siendo homosexuales, no
deben tener relación directa en la formación de nuestra juventud desde
una actividad artística o cultural…».

«Se debe evitar que ostenten una representación artística de nuestro
país en el extranjero personas cuya moral no responda al prestigio de
nuestra revolución. Solicitar penas severas para casos de corruptores de
menores, depravados reincidentes y elementos antisociales irreductibles».

El Comandante en Jefe y primer ministro Fidel Castro asiste a algunas de
las sesiones en el Congreso y José Ramón Fernández, ministro de
Educación, comparece en la televisión y explica las posiciones tomadas.

Se producen despidos de artistas e intelectuales «de vida amoral,
extravagante o escandalosa«. De semejantes despidos se salvan el
Instituto Cubano de Arte e Industria Cinematográficos (ICAIC), Casa de
las Américas y el Ballet Nacional de Cuba, bajo el amparo ofrecido por
la dirección de Alfredo Guevara, Haydée Santamaría y Alicia Alonso,
respectivamente.

1973

Se sanciona la Ley 1249, que modifica el Código de Defensa Social de
1938, y se criminaliza «la ostentación pública de la homosexualidad» con
penas de tres a nueve años de prisión. Esta ley fue derogada en 1979,
con la entrada en vigor del nuevo Código Penal, que siguió castigando a
los homosexuales.

1974

En marzo, se aprueba la Ley 1267, que modifica la Ley 1166, de Justicia
Laboral, a la que se agrega el inciso J, relativo a «El homosexualismo
ostensible y otras conductas socialmente reprobables que proyectándose
públicamente, incidan nocivamente en la educación, conciencia y
sentimientos públicos y en especial de la niñez y la juventud por parte
de quienes desarrollen actividades culturales o artístico-recreativas
desde centros de exhibición o difusión». La Ley 1267 lleva la rúbrica
del presidente Osvaldo Dorticós y del primer ministro, Fidel Castro.

1975

El Tribunal Supremo invalida la Resolución número 3 del Consejo de
Cultura, por la que se acordaron los parámetros que limitaban el empleo
a los homosexuales en el arte y la educación. Se restituyen los empleos
a los artistas e intelectuales cesantes por aquella resolución.

1979

Entra en vigor un nuevo Código Penal, que, en su artículo 359, bajo la
figura de «Escándalo público», dice: «Se sanciona con privación de
libertad de tres meses a nueve meses o multa hasta doscientas sesenta
cuotas o ambas al que: a) haga pública ostentación de su condición de
homosexual o importune o solicite con sus requerimientos a otro; b)
realice actos homosexuales en sitio público o en sitio privado pero
expuestos a ser vistos involuntariamente por otras personas; c) ofenda
el pudor o las buenas costumbres con exhibiciones impúdicas o cualquier
otro acto de escándalo público; ch) atisbe hacia el interior de las
viviendas por los huecos de las cerraduras, ventanas, postigos, lucetas
o rendijas, o de cualquier otro modo; d) produzca o ponga en circulación
publicaciones, grabados, cintas cinematográficas o magnetofónicas,
grabaciones, fotografías, u otros objetos obscenos, tendentes a
pervertir y degradar las costumbres».

Además, este Código Penal establece en sus artículos 77 y 78 los índices
de peligrosidad; y fija sanciones como «medidas de seguridad
predelictivas» y «postdelictivas» .

1980

Entre abril y septiembre, durante el éxodo del Mariel, alrededor de
125.000 cubanos abandonan la Isla con dirección a Estados Unidos. El
gobierno cubano deporta a enfermos mentales y presos comunes. Alentados
por las autoridades de la Isla, se realizan actos de repudio en contra
de los que se quieren ir. Los homosexuales, catalogados como
antisociales, son incluidos en la nómina de «indeseables, apátridas y
lumpens».

1984

El 12 de septiembre se estrena en el Festival Internacional de Cine de
Toronto, el documental Conducta impropia, de Néstor Almendros y Orlando
Jiménez Leal. El filme examina las persecuciones sufridas por los
homosexuales y artistas cubanos. Se incluyen entrevistas a José Mario,
Martha Frayde, René Ariza, Reinaldo Arenas, Guillermo Cabrera Infante,
Juan Goytisolo, Susan Sontag, Ana María Simo y Heberto Padilla, entre
otros. El guión del documental así como los testimonios descartados en
el montaje final de la película aparecen publicados en una edición
homónima (Editorial Playor, 1984; Editorial Egales, 2008, con DVD).

1986

En abril se inaugura el Sanatorio de Santiago de las Vegas, en las
afueras de La Habana, el primer sidatorio creado por las autoridades de
salud pública donde, en régimen de reclusión obligatoria, se atiende a
los seropositivos y enfermos de Sida.

Se imponen test analíticos a las personas que integran los grupos de
riesgo, sobre todo a quienes ejercen la prostitución con extranjeros,
«como medida para evitar el contagio de la población». No se ofrecen
garantías de confidencialidad sobre los resultados de los análisis de
sangre.

Los seropositivos pierden el derecho al trabajo, aunque reciben una
pensión. Para salir del sanatorio, en régimen de visita a familiares o
por otras razones, deben solicitar un permiso especial. El gobierno no
ofrece cifras de los casos de «internacionalistas» y ex combatientes de
la guerra de Angola seropositivos. Tal régimen de reclusión obligatoria
sería condenado por varios organismos internacionales de derechos humanos.

1988

El 30 de abril entra en vigor la Ley 62, por la que se aprueba un nuevo
Código Penal que, en su artículo 303, titulado «Escándalo público«,
expresa: «Se sanciona con privación de libertad de tres meses a un año o
multa de cien a trescientas cuotas al que: a) importune a otro con
requerimientos homosexuales; b) ofenda el pudor o las buenas costumbres
con exhibiciones impúdicas o cualquier otro acto de escándalo público;
c) produzca o ponga en circulación publicaciones, grabados, cintas
cinematográficas o magnetofónicas, grabaciones, fotografías u otros
objetos que resulten obscenos, tendentes a pervertir y degradar las
costumbres».

Según disposiciones complementarias, a los maestros o encargados en
cualquier forma de dirección de la juventud que sean declarados
culpables de violar, entre otros, dicho artículo «se les impone la
sanción accesoria de prohibición permanente para el ejercicio del
magisterio o de cualquier otra función de dirección de la juventud».

Se realiza la primera operación de cambio de sexo en Cuba, de un hombre
que pasa ser mujer. El caso se presenta en un congreso de Urología en el
Palacio de las Convenciones de La Habana.

1991

La revista Unión, en su número 12, publica el cuento El lobo, el bosque
y el hombre nuevo, de Senel Paz, que había ganado en 1990 el premio de
cuentos Juan Rulfo, convocado por Radio Francia Internacional.

1992

En declaraciones al periodista Tomás Borge, recogidas en el libro Un
grano de maíz, Fidel Castro da señales de amnesia histórica: «No voy a
negar que, en cierto momento, esta cosa machista influyó también en un
enfoque que se tenía hacia el homosexualismo. Yo personalmente —tú me
estás preguntando mi opinión personal—, no sufro de este tipo de fobia
contra los homosexuales. Realmente, en mi mente, esto nunca ha estado y
jamás he sido partidario, ni he promovido, ni he apoyado políticas
contra los homosexuales. Eso correspondió, yo diría, a una etapa
determinada y está asociado mucho con esa herencia, con esa cosa del
machismo. Trato de tener un argumento más humano y más científico del
problema. Esto muchas veces se convierte en tragedia, porque hay que ver
cómo piensan los padres; incluso hay padres que tienen un hijo
homosexual y eso se convierte para ellos en tragedia, y uno no puede
sentir sino pena porque una situación de ésas ocurra y se convierta
también en una tragedia para el individuo».

1993

En diciembre, el Festival del Nuevo Cine Latinoamericano de La Habana
estrena con gran éxito de público el largometraje de ficción Fresa y
Chocolate, de Tomás Gutiérrez Alea y Juan Carlos Tabío. La cinta arrasa
con los premios de la cita habanera, y también en los festivales de
Berlín y Gramado. Obtiene el Goya a la mejor película extranjera, en
España, y una nominación a la mejor película extranjera de la Academia
Cinematográfica de Hollywood.

«Fidel con este filme, asumido, y sin nada decir cerramos
internacionalmente ese horrible momento que algunos llaman Capítulo y
que prefiero llamar 'inciso', que fue la UMAP», escribió Alfredo
Guevara, presidente del Instituto Cubano de Arte e Industria
Cinematográficos, en carta a Fidel Castro, fechada el 23 de noviembre de
1993.

Se exhibe una retrospectiva de las películas de Pedro Almodóvar en el
Festival de Cine de La Habana.

1994

Durante varios meses, se mantiene en cartelera Fresa y chocolate (no fue
exhibida por la televisión cubana hasta 2007). La película se convierte
en un fenómeno social. Se abren ciertos espacios de tolerancia en
discotecas oficiales habaneras (Eco disco, Disc Joker, etcétera) y las
ilegales fiestas de «10 pesos» cobran popularidad entre gays y
lesbianas. A finales de la década, estos espacios irán mermando ante el
incremento del acoso policial.

El 28 de julio, 13 hombres y 5 mujeres crean —sin apoyo oficial— la
Asociación Cubana de Gays y Lesbianas. No hay reacción gubernamental.

Aparece la primera edición cubana de la novela Hombres sin mujer, de
Carlos Montenegro (Editorial Letras Cubanas), publicada en México en
1938 (Editorial Masas). Esta edición es una clara señal de que la
homosexualidad ha dejado de ser un «tema prohibido» en la política
editorial del Ministerio de Cultura, que ya desde fines de los años
ochenta había autorizado publicaciones con contenido homosexual.

1995

El 14 de noviembre, Manuel Hernández, jefe de la campaña nacional contra
el sida, anuncia que el 10 por ciento de los 1.180 seropositivos en
régimen de «cuarentena obligatoria» volverán a desarrollar una vida
normal. Antes de pasar al «régimen ambulatorio», los seropositivos deben
asegurar que asumirán «actitudes responsables». A partir de entonces, la
reclusión en los sanatorios de Sida deja de ser obligatoria. Se reconoce
el derecho de los seropositivos al empleo.

Se proyecta una retrospectiva de Pier Paolo Pasolini en el Festival de
Cine de La Habana.

1996

Se publica Machos, maricones and gays: Cuba and homosexuality, de Ian
Lumsden (Editorial Temple University Press, Estados Unidos), que analiza
la homosexualidad en Cuba. En el apéndice del libro aparecen textos de
Tomás Fernández Robaina, de Pablo Milanés, y un manifiesto de la
Asociación Cubana de Gays y Lesbianas.

1997

La Asociación Internacional de Gays y Lesbianas (ILGA, siglas en inglés)
denuncia que la supresión de la Asociación Cubana de Gays y Lesbianas,
luego del acoso sufrido por sus miembros, demuestra la falta de libertad
de asociación en la Isla.

El Decreto-Ley 175, del 17 de junio, modifica el artículo 303 del Código
Penal de 1987 en título y concepto, y se elimina la referencia a la
homosexualidad.

El 24 de agosto, la policía cubana realiza una redada de grandes
proporciones contra los gays que participan en la fiesta de El
Periquitón. Entre los presentes, el cineasta español Pedro Almodóvar, la
transexual Bibi Andersen y el modisto francés Jean Paul Gaultier.

La acción policial se salda con cientos de detenidos, que son llevados a
estaciones de policía y liberados al día siguiente. Se les impone una
multa de 30 pesos. Los organizadores de la fiesta son trasladados a la
prisión de 100 y Aldabó, en La Habana, donde permanecen varios meses.

2001

En febrero, un editorial del semanario oficialista Tribuna de La Habana,
firmado por su director, Ángel Rodríguez Álvarez, arremete contra los
gays y los travestis que se reúnen en el malecón habanero, frente a la
cafetería FIAT. El periodista considera que se debe negar el espacio
público a personas que califica de «prostitutas, proxenetas y
estrafalarios». Sobre los travestis, dice que son una «figura
desdichadamente extendida por el mundo, pero casi desconocida en Cuba».
Bajo el amparo de tales declaraciones, se efectúan redadas policiales.

El Ministerio de Cultura y el Comité Central del Partido Comunista
convocan a una reunión con los periodistas culturales para abordar «el
daño inmenso que está haciendo a la revolución» la difusión
internacional de la película Antes que anochezca, de Julian Schnabel,
basada en la autobiografía de Reinaldo Arenas.

Presiden la reunión el ministro de Cultura, Abel Prieto, Pedro de la
Hoz, periodista y asesor del ministro, y Alfonso Borges, jefe del
Departamento Ideológico del Comité Central.

Como consecuencia, el primer número de la revista digital La Jiribilla,
que aparece en mayo, es dedicado a Arenas. Se publica La política sexual
de Reinaldo Arenas (realidad, ficción y el archivo real de la revolución
cubana), del sindicalista estadounidense Jon Hillson.

El libelo de Hillson minimiza el impacto de las UMAP al calor del acoso
imperialista que ha sufrido la revolución cubana, y afirma que la
homosexualidad fue despenalizada en Cuba en 1979, con el nuevo Código
Penal (falsedad que ha sido repetida por los voceros oficiales y medios
de prensa); mientras añade que «en 1987, una nueva orden policial
prohibió el acoso de personas debido a su apariencia o manera de vestir,
lo cual se hacía amparándose en estatutos en contra de la conducta
ostentosa».

Violando los derechos de copyright y la voluntad del autor expresada en
su testamento, La Jiribilla publica los relatos Adiós a Manhattan y El
cometa Halley, de Arenas.

Se edita Gay Cuban Nation, del profesor cubanoamericano Emilio Bejel
(Editorial University of Chicago Press, Estados Unidos), el mayor
estudio del homoerotismo y la homofobia en la literatura, el cine y la
sociedad cubanos.

2003

Fidel Castro insulta a dos locutores de Miami que le hacen una broma
telefónica haciéndose pasar por Hugo Chávez, con gritos de «¿En qué caí,
comemierda? ¿En qué caí, maricón? ¿En qué caí, mariconzón?».
Asociaciones de gays y lesbianas publican comunicados de condena a la
homofobia evidente del gobernante cubano.

2004

En julio, en un reporte del corresponsal de la BBC en La Habana, una
funcionaria del gobierno cubano asegura que la Policía Nacional
Revolucionaria «no reprime a los homosexuales, sino las conductas
negativas que ellos tienen». «Algunos de los travestis presos son
personas que tenían otras causas pendientes», dice María Rodríguez,
psicóloga del Centro Nacional de Educación Sexual (CENESEX).

En septiembre, la revista Alma Mater, de casi nula circulación en la
Isla y destinada a los estudiantes universitarios, publica un dossier
sobre la homosexualidad en Cuba, un tema ignorado por los restantes
medios de comunicación cubanos. En una entrevista a Mariela Castro
Espín, directora del CENESEX, y titulada «Más relajados, no más
tolerantes», ésta aboga por una enmienda en la constitución cubana para
que en la Isla sea explícitamente ilegal discriminar a los homosexuales.

2005

El 9 de mayo, la Comisión Cubana de Derechos Humanos y Reconciliación
Nacional denuncia que, de enero a mayo, se han realizado redadas
policiales y detenciones de alrededor de 400 jóvenes, la mayoría
residentes en la capital, a los cuales se les aplica la figura de
«peligrosidad pre-delictiva», presente en el Código Penal. Entre los
detenidos había jóvenes que se supuestamente se dedicaban a la
prostitución homosexual.

El CENESEX y el Ministerio de Salud Pública patrocinan en agosto un
festival de cine gay en La Habana. La noticia no circula en los medios
de prensa cubanos, excepto en ciertas páginas en Internet, al que no
tienen acceso los cubanos de la Isla.

En diciembre, se inaugura una exposición del fallecido fotógrafo
estadounidense Robert Mapplethorpe, icono homosexual. Asiste Ricardo
Alarcón, presidente de la Asamblea Nacional del Poder Popular.

Durante ese mes, el CENESEX, que dirige Mariela Castro Espín, presenta
una iniciativa parlamentaria que permita legalizar el cambio de sexo.
Silencio total en la prensa cubana.

Retrospectiva de Pier Paolo Pasolini en el Festival de La Habana. Entre
sus títulos se incluye Saló o los 120 días de Sodoma.

2007

El 17 de mayo se celebra por primera vez en Cuba el Día Mundial Contra
la Homofobia.

2008

En mayo la televisión cubana emite el filme Brokeback Mountain, de Ang
Lee. Palabra Nueva, la revista de la Arquidiócesis de La Habana, pone el
grito en el cielo ante la normalización del «homosexualismo» en la isla.
Orlando Márquez firma el artículo «Llegamos o nos pasamos», en el que
asegura que tal normalización y la adopción de leyes en ese sentido
constituyen mensajes que "hacen peligrar la inocencia de los más pequeños".

En junio, el CENESEX anuncia que el Ministerio de Salud Pública ha
emitido una resolución mediante la cual se aprueban las operaciones de
cambio de sexo en la isla.

2010

El 31 de agosto, el periódico mexicano La Jornada publica una entrevista
a Fidel Castro con el titular: «Soy el responsable de la persecución a
homosexuales que hubo en Cuba».

http://manuelzayas.com/blog/mapa-de-la-homofobia

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